Al actuar sobre nuestro sistema nervioso central, tiene óptimos resultados para problemas de columna, aliviando las contracturas y los dolores en general.
Mediante las técnicas el practicante sube su nivel de energía y su potencial. Lo cual permite que pueda administrar mejor las exigencias cotidianas.
A través de más de 50 técnicas de respiración logramos oxigenación de todos los órganos y tejidos, estimulando la respiración celular y ampliando considerablemente nuestra capacidad pulmonar.
La práctica contribuye a reducir las tensiones localizadas en nuestro cuerpo y por consiguiente a mejorar notablemente la elasticidad y la flexibilidad.
Las técnicas corporales son ejercicios isométricos que generan un considerable aumento de la fuerza y el tono muscular sin ejercer impacto y cuidando nuestro cuerpo.
La práctica proporciona un plus de energía y vitalidad y contribuye a regularizar las funciones de todo nuestro organismo, que como consecuencia torna más fuerte nuestro sistema inmune.
Conocer la naturaleza de nuestras emociones, administrarlas y usar esa energía a nuestro favor es un verdadero arte que desarrollamos con la práctica.
A través de técnicas de concentración y meditación aprendemos a acallar nuestra mente, lo que nos proporciona una sensación de bienestar y un conocimiento más profundo de nosotro@s mism@s.